Aunque su implementación se ha visto limitada por brechas percibidas en recursos, tecnologías, cualificaciones o regulaciones, el diseño y la construcción de edificaciones sostenibles es una tendencia en crecimiento en todo el mundo. El programa Colombia + Competitiva se ha propuesto derrumbar los mitos alrededor de esta práctica y sentar las bases para su consolidación en el país.
Cuando se habla de construcción sostenible, inmediatamente se piensa en una práctica costosa, implementada en edificios premium, altamente especializada y en general poco rentable para quienes la producen y costosa para quienes la adquieren. Sin embargo, todas estas ideas son mitos que se han levantado alrededor del concepto de construcción sostenible.
Ahora bien, aunque es cierto que el desarrollo de este tipo de proyectos requiere de una expertise y un conocimiento diferente, esto no significa necesariamente que sea más complejo o sofisticado. Se trata más bien de un cambio de paradigma a la hora de abordar los procesos constructivos.
Con el objetivo de lograr ese cambio, el programa Colombia + Competitiva ha centrado sus esfuerzos en hacer frente al mayor enemigo de la construcción sostenible: el desconocimiento.
Uno de los mayores desafíos para la consolidación de la construcción sostenible es transmitir el concepto y que el sector comprenda que el cambio de enfoque va más allá de la implementación de algunas soluciones tecnológicas, esto implica un cambio de chip para entenderla como un conjunto de prácticas que integran, desde el uso de espacios y de materiales como la comprensión del contexto espacial y geográfico durante el diseño, hasta la integración de nuevos procesos durante las diferentes fases de la construcción.
Con el objetivo de lograr ese cambio de enfoque el programa ha trabajado en la introducción a prácticas sostenibles a través de instrumentos como la Guía de prácticas de Construcción Sostenible, el Roadmap de Construcción Sostenible y la introducción del enfoque en Edificaciones Saludables. De igual manera, se ha diseñado el catálogo de cualificaciones que orienta una oferta formativa para los trabajadores del sector facilitando la creación de las capacidades que necesita la industria para avanzar en la consolidación del enfoque sostenible.
“La investigación y la creación de conocimiento alrededor de la construcción sostenible nos ha ayudado a aterrizar la idea de sostenibilidad y desmitificar muchos de los prejuicios que se han construido en torno a ella. Esto nos ha permitido mostrar procesos de construcción sostenible, como el que se realiza con guadua y bahareque encementado, técnicas en las que Colombia es pionera y un referente, y que pueden ser consideradas sostenibles”, agregó Claudia Sepúlveda coordinadora del programa.
Los esfuerzos de capacitación y creación de bases de conocimiento han sido complementados con ejercicios de aplicación y experimentación, ejemplo de ello el Laboratorio Vivo de Construcción Sostenible, desarrollado en conjunto con el Cluster de Construcción de Santander y la Universidad Industrial de Santander para poner a prueba materiales y procesos constructivos basados en variables de manejo de agua, energía, agua y sol. Este desarrollo es un referente en Colombia del trabajo conjunto universidad-empresa y se convierte en un bien público que beneficia al sector a nivel nacional.
El programa continuará trabajando en el fortalecimiento de la construcción sostenible, con una visión transversal, enfocada en el desarrollo de capacidades, la eliminación de barreras regulatorias y la creación de incentivos adecuados para la promoción de la construcción sostenible, especialmente a nivel regional.